En posts anteriores abordamos las emociones positivas, hoy nos centramos en la Tendencia Negativa y cómo revertirla.

La Tendencia Negativa (Negativity Bias) es el nombre dado por los psicólogos a la predisposición a estar mucho más influenciados por los acontecimientos negativos que por los positivos. Prestamos más atención a las experiencias negativas y les damos más peso psicológico que los hechos neutrales o positivos. Esta tendencia de focalizar fácilmente en las cosas malas, los malos acontecimientos y la gente mala, significa que es más probable que recordemos un insulto, una crítica o un comentario negativo que un cumplido o una información positiva.

Todos hemos experimentado situaciones como las que describo a continuación en las que prestamos más atención a los acontecimientos negativos que a los positivos:

  • Un día con mis 2 hijos en la playa, llegamos a las 10 a.m. Nos divertimos mucho jugando, haciendo un picnic, remando, etc. Alrededor de las 3 p.m., mis hijos tuvieron su primera discusión y mi reacción fue decir: ‘¡Se acabó! Acabáis de arruinar el día. No se os puede llevar a ningún lado, ¡no sabéis comportaros bien!’. Y la verdad es que los niños se habían comportado fantásticamente bien durante 5 horas, sin embargo, contaba más esa discusión que el resto del día.
  • Regularmente hago presentaciones frente a grandes multitudes y generalmente en estos eventos, las personas completan unas hojas de evaluación. Puedo obtener muy buenos comentarios y puntuaciones alta, pero mi atención se centra en los comentarios negativos o las críticas, y eso es en lo que fácilmente puedo terminar pensando y reflexionando, incluso mucho más tarde.
  • Un profesor puede pasar una mañana fantástica en clase, pero irá a la sala de profesores y comentará con sus colegas sobre una cosa que salió mal: el niño travieso, el error, etc.

Lo cierto es que diariamente muchas cosas buenas nos suceden, pero no las notamos debido a nuestra tendencia a enfocarnos en las cosas que no están funcionando bien. Diversos estudios sugieren que se obtiene más placer de los aspectos rutinarios de la vida diaria cuando nos entrenamos personalmente reflexionando y apreciando las cosas simples. En definitiva, aprender técnicas para contrarrestar la tendencia negativa aumenta el bienestar.

 

Disfrutando (Savouring)

La forma en que las personas experimentan las experiencias positivas determina cuánta emoción positiva generará esa experiencia y cuánto promoverá su bienestar. Diversos estudios definen  como cualquier pensamiento o comportamiento capaz de generar, intensificar y prolongar el disfrute.

Saborear tiene un componente pasado, presente y futuro.

El pasado

El pasado se puede saborear pensando en todas las cosas buenas que ya han sucedido en la vida. Por ejemplo, nuestra infancia, nuestra primera mascota, unas buenas vacaciones, momentos divertidos que pasamos con los abuelos, los amigos del cole, etc.

Mi hija solía cambiar el fondo de pantalla del ordenador de casa por una foto de un evento pasado: una fiesta, un día fuera, una celebración, etc. Cuando encendía el ordenador, esto siempre generaba sentimientos agradables, independientemente del estado de ánimo en que me encontrase en aquel momento.

  • Mementos: Guardar elementos que sirven como recordatorio de un acontecimiento o experiencia positiva. Por ejemplo, una concha de la playa, la entrada de un concierto, etc.
  • Recuerdos positivos: buscar tiempo para compartir y comentar con el resto buenos momentos.
  • Hacer una caja de memoria o un libro: incorporar fotos, premios, dibujos, etc. Varios adolescentes lo están empezando a hacer a través de sus móviles u ordenadores.
  • The Three Good Things Exercice: El Ejercicio de las tres cosas buenas es una idea impulsada por Martin Seligman. La tarea consiste en escribir cada noche en una libreta 3 cosas buenas que hayan sucedido ese día y por las cuales te sintieron agradecidos. Su investigación mostró que, para muchos, este simple ejercicio puede aumentar la felicidad e incluso contrarrestar la depresión moderadamente. Esencialmente funciona para ayudar a enfocar la atención en buscar lo que es bueno en la vida.

El presente

El presente se puede saborear viviendo verdaderamente en él: comer lentamente y con gusto, sumergirse en un libro o una película, escuchar a un amigo, participar en un proyecto o disfrutar de los logros de un amigo.

La gran velocidad de la vida moderna y nuestro enfoque extremo en el futuro pueden fácilmente disminuir nuestro presente. Casi todos los avances tecnológicos en los últimos años se han centrado en hacer más y hacerlo más rápido. Rick Hanson, un neuropsicólogo sugiere realmente quedarse con una experiencia positiva de 10 a 20 segundos para que realmente pueda asimilar nuestra memoria.

5 pasos para aprender a disfrutar:

  1. Reduzca la velocidad
  2. Presta atención a lo que estás haciendo
  3. Usa todos tus sentidos
  4. Extender la experiencia
  5. Reflexiona sobre tu disfrute

El futuro

El futuro se puede saborear anticipando eventos futuros y entusiasmándose con ellos. Esto es similar al pensamiento optimista: pensar lo mejor de un evento futuro. Piense en lo feliz que se siente cuando espera una fiesta, una fiesta o una película. La planificación de buenas experiencias y la anticipación positiva a menudo es la parte más divertida de una actividad.

Es importante recordar que savouring es un proceso, no un resultado, es algo que no obtenemos. Aprender a superar nuestro prejuicio negativo y observar y prestar atención a las experiencias positivas es posiblemente una de las habilidades más importantes a desarrollar para mejorar nuestro bienestar y el de nuestros niños.

 

Autor: Simon Ward
Comparte
En este artículo, el investigador de Cambridge Graham Seed reflexiona sobre la importancia de enseñar competencias lectoras, por qué la lectura es tan útil en el mundo real y los retos a los que se enfrentan los profesores de inglés, además de darnos tres consejos para la enseñanza de competencias lectoras en clase.