La enseñanza digital se ha convertido en una herramienta esencial, especialmente con el aumento de la educación en línea. Las plataformas para dar clases online se dividen en dos grandes categorías: enseñanza sincrónica (en directo) y enseñanza asincrónica (a través de correos electrónicos y otras herramientas). En este artículo, exploraremos cómo aprovechar al máximo las plataformas de enseñanza sincrónica para impartir clases efectivas a tus alumnos.
Plataformas de videoconferencia
Las plataformas para dar clases online ofrecen una variedad de funciones útiles para los educadores. Entre las principales características se encuentran:
- Un lugar de encuentro virtual donde grupos de personas pueden verse unas a otras (mediante el uso de cámaras web) y charlar, siempre que dispongan de micrófonos.
- Un lugar donde los participantes pueden compartir prácticamente cualquiera de las cosas que se pueden compartir en un espacio de enseñanza presencial, como textos, enlaces a páginas, archivos de audio y de vídeo, fotografías o una presentación.
- La oportunidad de grabar los encuentros, de forma que los estudiantes pueden volver a ver partes de la sesión más tarde, y se pueden compartir los vídeos con aquellos que se la pierden.
- Ventanas de chat, símbolos de comunicación no verbal e incluso encuestas.
- Salas para grupos pequeños, donde puedes enviar a tus alumnos por grupos para que trabajen en algún ejercicio.
Puede que ya tengas acceso a alguna a través de tu centro, por lo que siempre es buena idea preguntar. Adobe Connect, Zoom, Blackboard Collaborate y Big Blue Button son todas plataformas muy conocidas, pero existen muchas otras (en esta comparativa encontrarás más ejemplos). Todas las plataformas contienen sus propios vídeos tutoriales, y hay muchos más disponibles en YouTube, así que, ¡no te compliques! Si tienes dudas, ¡pregunta a Google!
Cómo se usa Zoom
Zoom es una de las plataformas para dar clases online más populares. Aquí te explicamos cómo sacarle el máximo provecho:
- Existe una versión gratuita que puede utilizarse para sesiones individualizadas de duración indeterminada. No obstante, para clases grupales dispones tan solo de cuarenta minutos. Esta versión es estupenda para probar y descubrir si la plataforma satisface tus necesidades.
- La versión gratuita te permite utilizar las salas para grupos pequeños, pero estas se tienen que activar en la configuración antes de empezar la clase.
- La versión de pago te permite realizar encuestas, si bien esta opción no existe en la versión gratuita.
Una cuenta Pro cuesta 13,99 € al mes. Por ese precio, obtienes acceso para cien participantes, 24 horas de reunión y 1 GB de espacio para colgar vídeos.
En vez de aventurarme a explicar los pormenores técnicos de Zoom, te recomendaré que veas el siguiente vídeo, que te permitirá descubrir sus principales funciones y cómo utilizarlas.
Descubre Zoom
Primeros pasos
En primer lugar, programa una reunión (si lo deseas, a la hora a la que habrías impartido la clase presencial a tus alumnos en tu centro). Explica a tus alumnos cómo conectarse contigo/con tu sala puntualmente.
El profesor debe planificar la clase y hacer acopio, antes de que se celebre, de aquellos recursos que pueda necesitar. A la mayoría de profesores les resulta más sencillo aunar todo el contenido en una presentación. Si hay algún texto que deseas que tus alumnos lean antes de clase, o algún vídeo que deseas que vean, compártelos antes como tarea preparatoria.
Utiliza el método de la «clase invertida», que consiste en evitar leer, realizar ejercicios de listening largos y ver vídeos en el aula, y en repartir el tiempo del que se dispone entre comunicación oral y realizacion de ejercicios que sirvan para poner en práctica lo aprendido. El trabajo en el aula debe dedicarse principalmente a hablar, escuchar y responder, mejor que a leer o escribir nada que ocupe más que unas pocas líneas.
La clase
A medida que los alumnos vayan entrando al aula, es conveniente pedirles que hagan algo que les mantenga ocupados mientras el resto del grupo se incorpora y tú compruebas que funciona el sonido de todos los participantes. Por ejemplo, podrías romper el hielo con una pregunta a la que responder por escrito, como: «¿Preferirías ser un elefante, o un león?». Que contesten con un par de palabras o con un párrafo será lo de menos; el objetivo es que los alumnos empiecen a participar. Cuando estén todos conectados, con el sonido funcionando, da comienzo a la clase.
Es buena idea empezar con un programa que establezca los objetivos de aprendizaje. Así, los alumnos entenderán el propósito de la clase y qué metas sería deseable lograr.
Los ejercicios rompehielo son divertidos y permiten que todo el mundo participe y, por regla general, se relaje. Actividades del estilo de la búsqueda de la palabra que he compartido en el screencast funcionan muy bien. Los alumnos utilizan las herramientas para marcar las palabras (vocabulario relacionado con la clase) en la pantalla, escogen una de ellas para crear una frase que la ponga en contexto, y comparten la frase con el resto en voz alta.
Para empezar la lección principal, puedes impartir algún contenido lingüístico en forma de preguntas abiertas con el fin de poner a prueba el nivel de comprensión de la clase, o bien hacer referencia a alguna actividad de aprendizaje que hayas mandado realizar a tus alumnos antes de la sesión. En cualquier caso, una vez se haya impartido o resumido la lección, proporciona a tus alumnos un ejercicio que realizar.
Es un buen momento para que realicen una actividad relacionada con el tema divididos en pequeños grupos y en las salas dedicadas a ello.
Después, invita a todo el mundo a volver para poder poner en común la tarea, compartir los resultados, etc.
Si lo deseas, puedes repetir este ciclo en más de una ocasión durante una misma clase.
Repasa lo aprendido durante la clase.
Manda tarea para casa con objeto de consolidar el aprendizaje adquirido durante la sesión, y ejercicios preparatorios de cara a la siguiente.
Por lo general, casi todo lo que funciona en un aula física funcionará también en el aula virtual. No obstante, y especialmente las primeras veces, dedica más tiempo a la organización en el aula y a la preparación de actividades mientras tus alumnos y tú os adaptáis al nuevo medio.
Funciones de Zoom
Una vez que estés en una sesión, hay dos funciones principales que te interesará utilizar: la función de compartir pantalla y las aulas para grupos pequeños. Los vídeos que comparto a continuación te enseñarán a utilizar estas funciones:
Comparte pantalla en Zoom
Consejos para el uso efectivo de plataformas para dar clases online
- Comprueba el funcionamiento de tu propio sonido y cámara antes de la clase.
- Pon en práctica lo que desees que hagan tus alumnos junto a un amigo, compañero, hijo o compañero sentimental (o con cualquiera a quien logres convencer de que te ayude a realizar una pequeña prueba).
- Recuerda que varias personas de tu grupo podrían acceder al aula a través del teléfono o la tableta. Es importante tenerlo en cuenta a la hora de planificar tus clases.
- Pide a los alumnos que utilicen su nombre real cuando entren en clase. Los nombres virtuales y apodos dificultan el registro de los asistentes.
- Mantén la expectativa de que algo saldrá mal. Crea un grupo de Facebook, Skype o correo electrónico, o algún otro medio para enviar mensajes rápidamente a todos a la vez. Los grupos de WhatsApp son útiles, siempre y cuando tus alumnos no sean menores de 18 años. No es recomendable la posesión de números de teléfono que pertenezcan a menores.
- Si algo sale mal, permanece relajado, mantén la calma, sonríe y pregunta a los alumnos si alguno tiene alguna idea. Siempre cabe la posibilidad de que alguno de ellos sepa qué hacer. Si no, al menos ganarás algo de tiempo para pensar mientras ellos lanzan sus sugerencias.
- Por encima de todo, disfruta de tu clase.
Eric Yuan, consejero delegado de Zoom, ofrece a las escuelas K-12 sus herramientas de videoconferencia sin coste alguno. En muchos países, la crisis del coronavirus está complicando enormemente ese proyecto, aunque la situación cambia todos los días. Si es necesario, no dudes en ponerte en contacto con ellos antes de efectuar tu pago.
Si quieres ver el primer artículo de la serie “Ideas para profesores”, lee Cómo pasar tus clases al formato virtual #1 y Cómo pasar tus clases al formato virtual #2.
